Ya faltan 6 días!!!!
Hocus Pocus!
17.12.07
14.12.07
strange days
Y si, son días extraños..... un espiral. Todo parece dar vueltas, estar a veces en los mismos lugares, a veces mas abajo o mas arriba. A veces me escapo y estoy en otras partes. No he parado de correr, no quiero detenerme, como un vago instinto de supervivencia. Siento que el día que me detenga todo se va a venir encima. Y eso está próximo porque estoy cansada. Afortunadamente en casi una semana voy a tener un acto de desaparición. Regreso a un lugar tranquilo, donde soy la pequeña princesita (no su falsedad precisamente) y aunque todo se escape, yo estoy persiguiendo mariposas amarillas. Dormir hasta tarde y recibir mucho cariño. No bañarme y jugar pequeñas batallas con mis "feroces" perros. Hmmm. Cuenta regresiva. Faltan 9 días.
2.12.07
e r a s e u n a v e z . . . . . .
Anoche me dijiste que querías leer algo bonito aqui. Que todo sepa a tristeza no esta bien, me dijiste. Y si, te llenaría de historias bonitas y de euforia, te contaría sobre dos arlequines y sus conversaciones con dios. Te contaría cositas simples y sin pretensiones, como las cosas de las que hablo en un viaje de 7 horas por una carretera divertida y tediosa dependiendo de la suerte. Mi charquito de agua turbia, te las contaría una y otra vez y hasta depronto me animaría a cantar algo. Pero seguro hoy no será el día. Porque soy yo quien necesita que le cuenten esas historias. Soy yo quien quiere dormirse oyendo un cuento que tenga final de cuentito de hadas. Así muy a lo manu chao, de próxima estación esperanza. Pero ya verás, lo prometo, tendrás algo que leer aqui que te arranque una sonrisa y te haga creer que si me lo propongo podría contarle cuentitos de azúcar el día menos pensado.
15.11.07
Pareciera que es mejor seguir con el show del perrito muerto que pararse y declararse vivo. Pareciera, pero no vamos a hacerlo. Tendrá que existir otra manera de lidiar con esto de los osos y las pirañas y los huesos rotos y las maldiciones. Si, no mas show, no mas trucos, no mas ases bajo la manga (los mas pasivos los tengo yo). Esta semana la cabeza me da vueltas y pide refugio en lugares neutros y tranquilos. La música sigue acompañando y los sueños raros que hablan de lo que no percibo. Las gafas rotas, el hospital de locos, la posibilidad de hacerse invisible, la charla con mi padre. Gallo rojo, gallo negro: Un cotillón de plumas y dinero / uno está rengo, el otro ciego /y nadie sabe cuál va a caer primero /los dos son rojos, los dos son negros.
14.11.07
Conversación entre Oveja 34 y Cangrejo 22.
Oveja 34: Quisiera que esto se quedara entre vos y yo, pero ya sabes está el asunto del poodle.
Cangrejo 22: Ya te dije lo que pienso de eso.
Oveja 34: Sabes bien que no pienso matarlo. El poodle se queda. No es mi problema que no lo soportes.
Cangrejo 22: Querida, no es cuestión de paciencia, es cuestión de estética. Y por cierto, estoy a punto de pensar que lo único que vos querés es arruinar la mía.
Oveja 34: Soy una simple oveja. No tengo planes macabros para borrar esa bonita sonrisa de tu cara. Estas lejos de conocer las verdaderas intenciones de esto del poodle. Tanto él como yo somos inofensivos.
Cangrejo 22: Ya te dije lo que pienso de eso.
Oveja 34: Sabes bien que no pienso matarlo. El poodle se queda. No es mi problema que no lo soportes.
Cangrejo 22: Querida, no es cuestión de paciencia, es cuestión de estética. Y por cierto, estoy a punto de pensar que lo único que vos querés es arruinar la mía.
Oveja 34: Soy una simple oveja. No tengo planes macabros para borrar esa bonita sonrisa de tu cara. Estas lejos de conocer las verdaderas intenciones de esto del poodle. Tanto él como yo somos inofensivos.
13.11.07
2.11.07
Desde el purgatorio.
Creo que debo soltarme a mi misma y no temer por mi suerte. Tengo las tijeras. ¿Dónde están los hilos que me amarran?
Siento deberme algo a mi misma. Siento que hay algo nauseabundo que yo misma he logrado y que no percibo. ¿Será cuestión de olfato o de intuición? Yo no estoy enferma. Igual, que mas da, yo creería que la muerte ya llegó, aunque el entierro solo sea en meses.
Bienvenido al purgatorio. Entre bajo su propio riesgo pero eso sí, siéntase como en casa.
No me grites, no me susurres, yo se leer los labios, si, incluso esos, morados y envidiosos. Créeme cuando te digo que no existe diferencia entre unos vivos y otros muertos, los movimientos son los mismos, quizás existe un poco de destiempo, pero no afecta el resultado.
¿Pena? ¿Desolación? ¿Desespero eterno? ¿Remordimiento? ¿Acaso eso no eran solo cuentos? Ah claro, los cuentos también son a veces producto de la realidad. Si, yo también soy producto de la realidad y mírame que bien estoy.
¿Mi primer remordimiento? No me acuerdo. Seguramente me avergonzaría recordarlo. No te sucede que a veces miras atrás y sientes haber armado una tormenta en un vaso con agua? Pues déjame decirte, que mi mesita de noche mental está llena de ellos. No, no me los bebo..... a veces quisiera, porque pareciera que ya no hay espacio para ninguno más, sin embargo siempre termina existiendo un lugar para ese futuro vaso, además si me los bebiera terminarían todos en un mismo punto al cual ya no me pertenecerían, no quiero que fluyan, no quiero que se transforme el lugar que he creado para ellos en este, mi mundo.
Ahora te pregunto.... ¿Cuál es tu último remordimiento?
¿Es acaso por mentir? ¿Por flagelo? ¿Por autosuperación? ¿Por malos pensamientos? ¿Por deseos sórdidos? ¿Por venganza? Lo piensas pero no me lo dices. No importa, con que lo hayas traído de nuevo a tu mente me basta. Yo en realidad no quiero saberlo, solo quería que tu lo supieras.
¿Existe algún lugar para mirar el cielo? Creo que me hará falta. ¿Alguna vez lo has extrañado? ¿Aún sabes que es extrañar? Veo. Pareciera que lo único que no se deja atrás en un lugar como este es el olvido, ya bastante tengo con lo que he olvidado ya y ahora se que eso no se detendrá.
Alguien ha estado soñando conmigo, imaginándome, deseándome a su antojo. Y lo ha hecho a través de la muerte, de su muerte provocada por mi y de mi muerte provocada por él. Me lo ha dicho esta mañana, a mi me parece algo entre macabro e infantil. ¿Qué tan reales pueden ser sus sueños, sus pensamientos, sus deseos? ¿En verdad desea asesinarme con esos interminables cuchillos de los que me habla? ¿En verdad quiere que yo simplemente lo lance al vacío? Aún no lo se, quizás algún día sepamos si este hombre tiene algo de profeta o era un soñador perdido como tantos otros.
Una reverencia al amor ridículo. Una reverencia y una sutil despedida. A los amores ridículos nadie les pide explicaciones, los subestiman y por eso nadie quiere saber de ellos, (no saben lo que se pierden, pero tampoco quiero que lo sepan) al igual que todos no quieren saber de la noche como oscuridad, y a esta tiniebla nocturna como eternidad. Por ahí oigo a alguien cantar que amanece el alma, mentiras, el alma está tan lejana que ningún sol puede amanecerla, pero no te preocupes, el alma no necesita de la fotosíntesis.
El que cree que existen unas escaleras al cielo, es porque definitivamente no tiene la voluntad para subirlas. Acá también existen escaleras, pero estás no conducen a ninguna parte, estoy por creer que son simplemente un adorno. Acá en el purgatorio, he encontrado a mi caleidoscopio roto, se me había olvidado que significa reflejarse y seguir una geometría, se me había olvidado que encierra ser de colores y cambiar al ritmo de una mano, se me había olvidado que basta internar un ojo para llegar a otra dimensión, aunque esta pueda estar rota.
Ya el contraste entre los unos y los otros es imposible. Los transeúntes solían ser mis anónimos favoritos, hasta que supe que iba a verlos de por vida. Ahora sus rostros se agregan a mi memoria, como si esta no tuviera mas que hacer que coleccionar rostros en fotografías formato cédula.
¿Quieres satisfacción? Ven por ella, acá la venden muy barato, aunque venden muy poca, la mayoría siente vergüenza de adquirirla, están convencidos que deben continuar con su flagelo como símbolo de arrepentimiento, pero sus ojos se le van tras esos frascos con pequeñas etiquetas. ¿Estás seguro que por tu satisfacción estas en este lugar? Yo no lo creo..... es quizás tu vago remordimiento el que te ha traído hasta acá. Los expendedores de satisfacción merodean por ahí y de vez en cuando dejan caer un frasquito para que todos recuerden a que huele eso. Las hienas se alborotan, los conejos y las avispas también.
Aún sigo sin encontrar los hilos que me amarran. Pero estar tantos días en este lugar, me ha hecho olvidar el afán que tenía por cortarlos. Aún espero encontrarlos, pero ya no los busco. Y aunque conversar con muertos nunca fue lo mío, estos han resultado una excelente compañía. Así que que mas da......... que mas da permanecer un poco más, esos hilos deben estar deshaciéndose con la lluvia que debe haber caído sobre ellos todos estos días. Que mas da si me demoro un poco en seguir mi camino, en el purgatorio he encontrado a mi caleidoscopio roto y con él muchos fragmentos de lo que he sido y sigo siendo, aún así el rompecabezas sigue bastante incompleto, pero que mas da, si tengo tiempo, yo no pienso subir por esas escaleras que conducen al cielo.
Siento deberme algo a mi misma. Siento que hay algo nauseabundo que yo misma he logrado y que no percibo. ¿Será cuestión de olfato o de intuición? Yo no estoy enferma. Igual, que mas da, yo creería que la muerte ya llegó, aunque el entierro solo sea en meses.
Bienvenido al purgatorio. Entre bajo su propio riesgo pero eso sí, siéntase como en casa.
No me grites, no me susurres, yo se leer los labios, si, incluso esos, morados y envidiosos. Créeme cuando te digo que no existe diferencia entre unos vivos y otros muertos, los movimientos son los mismos, quizás existe un poco de destiempo, pero no afecta el resultado.
¿Pena? ¿Desolación? ¿Desespero eterno? ¿Remordimiento? ¿Acaso eso no eran solo cuentos? Ah claro, los cuentos también son a veces producto de la realidad. Si, yo también soy producto de la realidad y mírame que bien estoy.
¿Mi primer remordimiento? No me acuerdo. Seguramente me avergonzaría recordarlo. No te sucede que a veces miras atrás y sientes haber armado una tormenta en un vaso con agua? Pues déjame decirte, que mi mesita de noche mental está llena de ellos. No, no me los bebo..... a veces quisiera, porque pareciera que ya no hay espacio para ninguno más, sin embargo siempre termina existiendo un lugar para ese futuro vaso, además si me los bebiera terminarían todos en un mismo punto al cual ya no me pertenecerían, no quiero que fluyan, no quiero que se transforme el lugar que he creado para ellos en este, mi mundo.
Ahora te pregunto.... ¿Cuál es tu último remordimiento?
¿Es acaso por mentir? ¿Por flagelo? ¿Por autosuperación? ¿Por malos pensamientos? ¿Por deseos sórdidos? ¿Por venganza? Lo piensas pero no me lo dices. No importa, con que lo hayas traído de nuevo a tu mente me basta. Yo en realidad no quiero saberlo, solo quería que tu lo supieras.
¿Existe algún lugar para mirar el cielo? Creo que me hará falta. ¿Alguna vez lo has extrañado? ¿Aún sabes que es extrañar? Veo. Pareciera que lo único que no se deja atrás en un lugar como este es el olvido, ya bastante tengo con lo que he olvidado ya y ahora se que eso no se detendrá.
Alguien ha estado soñando conmigo, imaginándome, deseándome a su antojo. Y lo ha hecho a través de la muerte, de su muerte provocada por mi y de mi muerte provocada por él. Me lo ha dicho esta mañana, a mi me parece algo entre macabro e infantil. ¿Qué tan reales pueden ser sus sueños, sus pensamientos, sus deseos? ¿En verdad desea asesinarme con esos interminables cuchillos de los que me habla? ¿En verdad quiere que yo simplemente lo lance al vacío? Aún no lo se, quizás algún día sepamos si este hombre tiene algo de profeta o era un soñador perdido como tantos otros.
Una reverencia al amor ridículo. Una reverencia y una sutil despedida. A los amores ridículos nadie les pide explicaciones, los subestiman y por eso nadie quiere saber de ellos, (no saben lo que se pierden, pero tampoco quiero que lo sepan) al igual que todos no quieren saber de la noche como oscuridad, y a esta tiniebla nocturna como eternidad. Por ahí oigo a alguien cantar que amanece el alma, mentiras, el alma está tan lejana que ningún sol puede amanecerla, pero no te preocupes, el alma no necesita de la fotosíntesis.
El que cree que existen unas escaleras al cielo, es porque definitivamente no tiene la voluntad para subirlas. Acá también existen escaleras, pero estás no conducen a ninguna parte, estoy por creer que son simplemente un adorno. Acá en el purgatorio, he encontrado a mi caleidoscopio roto, se me había olvidado que significa reflejarse y seguir una geometría, se me había olvidado que encierra ser de colores y cambiar al ritmo de una mano, se me había olvidado que basta internar un ojo para llegar a otra dimensión, aunque esta pueda estar rota.
Ya el contraste entre los unos y los otros es imposible. Los transeúntes solían ser mis anónimos favoritos, hasta que supe que iba a verlos de por vida. Ahora sus rostros se agregan a mi memoria, como si esta no tuviera mas que hacer que coleccionar rostros en fotografías formato cédula.
¿Quieres satisfacción? Ven por ella, acá la venden muy barato, aunque venden muy poca, la mayoría siente vergüenza de adquirirla, están convencidos que deben continuar con su flagelo como símbolo de arrepentimiento, pero sus ojos se le van tras esos frascos con pequeñas etiquetas. ¿Estás seguro que por tu satisfacción estas en este lugar? Yo no lo creo..... es quizás tu vago remordimiento el que te ha traído hasta acá. Los expendedores de satisfacción merodean por ahí y de vez en cuando dejan caer un frasquito para que todos recuerden a que huele eso. Las hienas se alborotan, los conejos y las avispas también.
Aún sigo sin encontrar los hilos que me amarran. Pero estar tantos días en este lugar, me ha hecho olvidar el afán que tenía por cortarlos. Aún espero encontrarlos, pero ya no los busco. Y aunque conversar con muertos nunca fue lo mío, estos han resultado una excelente compañía. Así que que mas da......... que mas da permanecer un poco más, esos hilos deben estar deshaciéndose con la lluvia que debe haber caído sobre ellos todos estos días. Que mas da si me demoro un poco en seguir mi camino, en el purgatorio he encontrado a mi caleidoscopio roto y con él muchos fragmentos de lo que he sido y sigo siendo, aún así el rompecabezas sigue bastante incompleto, pero que mas da, si tengo tiempo, yo no pienso subir por esas escaleras que conducen al cielo.
1.11.07
El sórdido entendimiento del abandono....
Se desdibujada en aquel entonces a los insensatos pájaros que venían a estrellarse en mi ventana todas las mañanas. La puerta nunca se abría, y las cartas se iban acumulando. Supongo que todos querían contarme historias acerca de sus vidas, mientras tanto el ruido del televisor dialogaba con mi perro. La mañana siempre fue una pobre moribunda. Siempre quise verla morir, para saber como sería su entierro.........
25.10.07
Hoy serían 68.
Cuando la suerte, que es grela,
fallando y fallando
te largue parao....
Cuando estés bien en la vía,
sin rumbo, desesperao...
Cuando no tengas ni fe,
ni yerba de ayer
secándose al sol....
Cuando rajés los tamangos
buscando ese mango
que te haga morfar...
la indiferencia del mundo
que es sordo y es mudo
recién sentirás.
Verás que todo es mentira,
verás que nada es amor...
que al mundo nada le importa
Yira...Yira...
Aunque te quiebre la vida,
aunque te muerda un dolor,
no esperes nunca una ayuda,
ni una mano, ni un favor...
Cuando estén secas las pilas
de todos los timbres
que vos apretás,
buscando un pecho fraterno
para morir abrazao...
Cuando te dejen tirao
después de cinchar,
lo mismo que a mí...
Cuando manyés que a tu lado
se prueban la ropa
que vas a dejar...
¡Te acordarás de este otario
que un día, cansado,
se puso a ladrar!
23.10.07
Conversación con el chico cafeína
-¿Y la cerda ya pasó a mejor vida?
-Aún no. Necesito primero que deje de soñar con cuchillos. Necesito que pierda toda esperanza.
-Decile en voz baja que yo ya la perdí. Y que se cuide de los conejos, porque a veces son peores que los cerdos.
-La gran diferencia es que los cerdos nunca podrían empuñar un cuchillo (o ser sinceros que es lo mismo)
-Mira, no defenderé a los cerdos, son repugnantes. Incluso la cerda que te regalé por tu cumpleaños. Pero no me vengas con cuentos. Los conejos no son mas sinceros que los cerdos.
-Mi querida, tus cuestiones filosóficas me tienen sin cuidado. A mi solo me importan tus cuestiones inmorales.
-Obvio, porque sos mi conejito blanco de ojos rojos.
-Y no finjas que eso a vos no te encanta…………
-Aún no. Necesito primero que deje de soñar con cuchillos. Necesito que pierda toda esperanza.
-Decile en voz baja que yo ya la perdí. Y que se cuide de los conejos, porque a veces son peores que los cerdos.
-La gran diferencia es que los cerdos nunca podrían empuñar un cuchillo (o ser sinceros que es lo mismo)
-Mira, no defenderé a los cerdos, son repugnantes. Incluso la cerda que te regalé por tu cumpleaños. Pero no me vengas con cuentos. Los conejos no son mas sinceros que los cerdos.
-Mi querida, tus cuestiones filosóficas me tienen sin cuidado. A mi solo me importan tus cuestiones inmorales.
-Obvio, porque sos mi conejito blanco de ojos rojos.
-Y no finjas que eso a vos no te encanta…………
22.10.07
-Eres emocionalmente inaccesible y temporalmente complicada. Gracias Mr. Brightside por la humilde opinión. No se cuántas veces va a decírmelo mientras tomamos whisky. Y cuantas veces voy a decirte yo, que prefiero ser una chica ruda. Claro, es difícil de creer. Siempre he sido una princesita, de esas de buenos modales, de cruzar siempre la pierna y dar las gracias con una sonrisa. Pero a esta altura de la vida, creo que es oportuno olvidarme de alguno de esos modales. De no ser tan sobria y echarme discursos magistrales antes de tirar con él y con cualquiera. Basta de engaños y apariencias. De fingir que la carne fresca no nos gusta y que siempre hay un camino correcto. Oh, los pasos a seguir, mi querido. Déjalo así Mr. Brightside porque seguro no te va a gustar lo que vas a seguir viendo. Tu sonríes entonces y me sirves otro whisky. Uno más fuerte para comprobar que lo que digo es cierto. Pero lo sabes bien, siempre terminaré con las mismas expresiones al final del trago. Te burlas de mi, pequeño Sócrates. Pero dejas de hacerlo cuando me acerco y te digo al oído las cosas sucias que quieres oír. Cuánto te gusta que no sea una princesita en ese momento. Y a mí cuanto me gusta que sea tan obvio el asunto, porque si el asunto se descarrila, ya sabemos por donde siempre podemos regresar. Y si, algún día no tendremos retorno. Tu vas a acelerar demás y nos vamos a estrellar. Yo solo te pido que sea rápido y que no me de cuenta de nada, que esté sonando una buena canción mientras tanto, que este a todo volumen y que yo este bailando con los ojos cerrados. No creo que sea mucho pedir. No creo por mas resentido que puedas ser, que quieras que me de cuenta absolutamente de todo. Hasta los más infames a veces tienen su lado tierno. Vamos Sócrates muéstrame tu lado tierno. Y cuando digo eso, siempre me muestras tus dientes, esos afiladitos que tienes siempre con tan buena disposición. Y cuando tú me pides que te muestre mi lado tierno, yo te llevo a volar, cariño. Y a nadar. Aprendimos a nadar en este mierdero juntos y eso fue hermoso. Pero tu me decías que no me acostumbrara a eso, que todo se iba a ir algún día. Y mientras tú decías eso, yo clavaba y me hundía más. Me gustaba tocar fondo. Y cada vez el fondo estaba mas lejos y una vez casi me ahogo y tu me rescataste y me advertiste que si no me comportaba me ibas a poner el flotador mas espantoso que encontraras. Y en verdad lo hiciste. Solo que antes que me lo pusieras levante mi mano derecha y juré no volver ahogarme en mierda alguna. Y ahora, protestas porque quieres que lo haga. En verdad que no te entiendo. Me dices que es porque en el cielo todo está bien y que si yo estoy ahí tú vas a poder estar tranquilito. Siempre eres tan considerado, que quiero llorar. Pero también hicimos un pacto sobre las lágrimas. Ahora se las vendo al mejor postor. Tú les pones su precio y buscas al comprador perfecto. Ambos sabíamos que con estos ojitos, esto de llorar iba a ser un negocio lucrativo. Ahora no lloro mas, se te acabó el negocio. Ahora no compras whisky a mis costillas. Pero igual encuentras otra chica con quien hacerlo. Es un bonito ciclo, no puedo negarlo, porque cuando quieres conseguir algo, eres tan sexy, incluso cuando esto se pone en blanco y negro, como ahora. En blanco y negro me gusta despedirme en cámara lenta y besarte en cámara lenta. En blanco y negro me gusta comportarme como una chica complaciente, pero digna. Pero por alguna razón, a vos eso te desespera. Eres un maldito Sócrates, porque arruinas los mejores momentos y eso que cada vez son menos. Tú prefieres que nos despellejemos con cortaúñas. Somos soldados, no peluqueros. Repite esto en voz alta y beberé todo el whisky que quieras y te prometo no hacer gesto alguno. Repítelo muchas veces y nos declararemos la guerra cagados de la risa y borrachos. El tiempo se nos acaba y yo tengo mis propios cuentos. Será como cuando jugamos risk esa noche y me dijiste que sabías mucho de estrategia porque conocías la historia y de porque fracasaban las batallas. Para que voy a negártelo, tu ego enorme te hacía un muy buen contrincante en ese momento. Y seguro sabías de historia, pero perder ese jueguito ante una mujer no era una posibilidad para ti. Era un encanto verte enfurecer ante la sorpresa de los dados y que esta chica, la de las fichas rojas, a veces también tuviera su as bajo la manga. Te gustaba irte con toda y aniquilar ejércitos de 15 soldados con otros de 50. Te encanta ese tipo de perspectiva, donde tienes las de ganar de manera aplastante. Y luego me decías, nena, es solo un juego. Y claro que es solo un juego. No tiene porque ser otra cosa sino esa. Y te venías con tus lecciones de historia, así, muy literalmente. A mi solo me gustaron aquellas del Barón Rojo. De resto, no quiero pasado alguno en mi vida. Y eso sí que puede poner denso el asunto. Pero te lo digo, Mr. Brightside, que el pasado, pasado es y que si no encuentro nada mejor que hacer con él que olvidarlo, no es tu problema. Tu por mi, puedes ver el canal de historia todo el tiempo, mientras yo estoy bajo la lluvia cantando tu canción favorita. Déjate de guevonadas y ven conmigo bajo la lluvia. Relajémonos un poco y pon una sonrisa en esa boquita que tanto me gusta. Relájate, que puedes matar mis soldaditos cuantas veces quieras. Pero no, tu te tomas otro whisky y llegas a mi borracho de promesas. Ni pasado ni futuro. Al menos no conmigo. Vos podés ser mejor que eso y por alguna razón que no entiendo, no quieres serlo. Te quieres comportar como un bastardito, un cretino. E insistes en golpear. Lindas maneras de acabar con todo. Pero aun así, prefiero mi final del carro, que a este patético que le estás dando. Pero bueno, Sócrates lo haremos a tu manera, porque a la final aquí el verdadero rudo sos vos. Yo solo me ilusiono con serlo.
18.10.07
17.10.07
The Melancholy Death of Oyster Boy. By Tim Burton
He proposed in the dunes,
they were wed by the sea,
Their nine-day-long honeymoon
was on the isle of Capri.
For their supper they had one specatular dish-
a simmering stew of mollusks and fish.
And while he savored the broth,
her bride's heart made a wish.
That wish came true-she gave birth to a baby.
But was this little one human
Well, maybe.
Ten fingers, ten toes,
he had plumbing and sight.
He could hear, he could feel,
but normal?
Not quite.
This unnatural birth, this canker, this blight,
was the start and the end and the sum of their plight.
She railed at the doctor:
"He cannot be mine.
He smells of the ocean, of seaweed and brine."
"You should count yourself lucky, for only last week,
I treated a girl with three ears and a beak.
That your son is half oyster
you cannot blame me.
... have you ever considered, by chance,
a small home by the sea?"
Not knowing what to name him,
they just called him Sam,
or sometimes,
"that thing that looks like a clam"
Everyone wondered, but no one could tell,
When would young Oyster Boy come out of his shell?
When the Thompson quadruplets espied him one day,
they called him a bivalve and ran quickly away.
One spring afternoon,
Sam was left in the rain.
At the southwestern corner of Seaview and Main,
he watched the rain water as it swirled
down the drain.
His mom on the freeway
in the breakdown lane
was pouding the dashboard-
she couldn't contain
the ever-rising grief,
frustration,
and pain.
"Really, sweetheart," she said
"I don't mean to make fun,
but something smells fishy
and I think it's our son.
I don't like to say this, but it must be said,
you're blaming our son for your problems in bed."
He tried salves, he tried ointments
that turned everything red.
He tried potions and lotions
and tincture of lead.
He ached and he itched and he twitched and he bled.
The doctor diagnosed,
"I can't quite be sure,
but the cause of the problem may also be the cure.
They say oysters improve your sexual powers.
Perhaps eating your son
would help you do it for hours!"
He came on tiptoe,
he came on the sly,
sweat on his forehead,
and on his lips-a lie.
"Son, are you happy? I don't mean to pry,
but do you dream of Heaven?
Have you ever wanted to die?
Sam blinked his eye twice.
but made no reply.
Dad fingered his knife and loosened his tie.
As he picked up his son,
Sam dripped on his coat.
With the shell to his lips,
Sam slipped down his throat.
They burried him quickly in the sand by the sea
-sighed a prayer, wept a tear-
and they were back home by three.
A cross of greay driftwood marked Oyster Boy's grave.
Words writ in the sand
promised Jesus would save.
But his memory was lost with one high-tide wave.
they were wed by the sea,
Their nine-day-long honeymoon
was on the isle of Capri.
For their supper they had one specatular dish-
a simmering stew of mollusks and fish.
And while he savored the broth,
her bride's heart made a wish.
That wish came true-she gave birth to a baby.
But was this little one human
Well, maybe.
Ten fingers, ten toes,
he had plumbing and sight.
He could hear, he could feel,
but normal?
Not quite.
This unnatural birth, this canker, this blight,
was the start and the end and the sum of their plight.
She railed at the doctor:
"He cannot be mine.
He smells of the ocean, of seaweed and brine."
"You should count yourself lucky, for only last week,
I treated a girl with three ears and a beak.
That your son is half oyster
you cannot blame me.
... have you ever considered, by chance,
a small home by the sea?"
Not knowing what to name him,
they just called him Sam,
or sometimes,
"that thing that looks like a clam"
Everyone wondered, but no one could tell,
When would young Oyster Boy come out of his shell?
When the Thompson quadruplets espied him one day,
they called him a bivalve and ran quickly away.
One spring afternoon,
Sam was left in the rain.
At the southwestern corner of Seaview and Main,
he watched the rain water as it swirled
down the drain.
His mom on the freeway
in the breakdown lane
was pouding the dashboard-
she couldn't contain
the ever-rising grief,
frustration,
and pain.
"Really, sweetheart," she said
"I don't mean to make fun,
but something smells fishy
and I think it's our son.
I don't like to say this, but it must be said,
you're blaming our son for your problems in bed."
He tried salves, he tried ointments
that turned everything red.
He tried potions and lotions
and tincture of lead.
He ached and he itched and he twitched and he bled.
The doctor diagnosed,
"I can't quite be sure,
but the cause of the problem may also be the cure.
They say oysters improve your sexual powers.
Perhaps eating your son
would help you do it for hours!"
He came on tiptoe,
he came on the sly,
sweat on his forehead,
and on his lips-a lie.
"Son, are you happy? I don't mean to pry,
but do you dream of Heaven?
Have you ever wanted to die?
Sam blinked his eye twice.
but made no reply.
Dad fingered his knife and loosened his tie.
As he picked up his son,
Sam dripped on his coat.
With the shell to his lips,
Sam slipped down his throat.
They burried him quickly in the sand by the sea
-sighed a prayer, wept a tear-
and they were back home by three.
A cross of greay driftwood marked Oyster Boy's grave.
Words writ in the sand
promised Jesus would save.
But his memory was lost with one high-tide wave.
15.10.07
Sueño de solentiname
Después de un mes, decido abrir las cajas y organizarlas. Había pospuesto el asunto dejándolas en un rincón que no estorbaran. Hoy decidí reorganizar, abrir las cajitas de pandora y darle un lugar a todo lo que hace tanto tiempo estuvo en otro. Es raro. Encontré rastros y recuerdos. Ahí estabamos los dos, el fantasma y yo. Llovía mucho, nadie quiso escapar entonces. Algunos fueron buenos tiempos, definitivamente. Pero como lo dije, ahora el siniestro personaje y yo caminamos en direcciones opuestas. A veces yo hago trampa y camino en circulos o hago pequeños espirales, estirando las manos simulando volar. No se si alguien se da cuenta, porque nadie dice nada, todo está mas tranquilo y silencioso. Es un bosque, donde se filtra en sol en pedacitos y cuando te llega un pedacito de esos se siente bien. Hoy todo está distinto. Jim y yo estamos de frente ahora y la ventana ahora es toda mía. Me gusta eso. El dragón sigue a mis pies. Ayer mientras cuidaba mis sueños, me llevó a un pueblo que era como una versión China de Taganga. Divertido. Mi inconsciente va cediendo y no trae consigo ya tanto al fantasma. Llevo tres noches sin soñar con él. El inconsciente se libera y no le pertenece a nadie mas. El consciente tiene su propio proceso. Mis ojos y mi manera de ver el mundo también. Es normal. Hoy tengo un poco de melancolía en la punta de la lengua. Culpa del fantasma y de bajarle al azúcar, aunque hoy hice trampa: vaso de leche y galletas de chocolate y aun así el sabor continuó ahí. Eso me recuerda al chico ostra, el mismisimo de Burton. Solo que a mi me falta tener los ojos mas desorbitados. Pero mientras eso pasa y todo lo demás, ya lo contenido en las cajitas de pandora están en su lugar. Y con fantasma y todo, pero este fue dulce y nunca prentedió arrancarme la punta de la lengua. O si lo pretendió, jamás lo hizo, afortunadamente. Me gusta saber que hasta los fantasmas pueden comportarse si se lo proponen.
Buenas noticias. Las cosas son eternas mientras duran. Y yo ahora pienso en ovejas flotando y cuando las miro pasar ellas me sonrien. Se les ve muy bien, tranquilitas. Mientras tanto los días siguen pasando. Y si, los sueños siguen apareciendo, pero son distintos. La obsesión se aleja y se desdibuja. El inconsciente empieza a ponerse de mi lado y me lleva a conciertos, y a veces me trasquila. Comienzo a despertar y tengo otras imágenes llegando. Se siente bien. El siniestro personaje y yo caminamos en direcciones opuestas, vendados a veces, otras no. Le dí mi pedazo de pan a un perro blanco que encontré y ya no tengo como dejar rastro alguno. No soy Gretel, nunca mas. Soy una pequeña aparecida, una ñoña, una vagabunda. Y todo comienza a ser mas coherente. Reaparecen personajes y aparecen otros nuevos. Nos disfrazamos y encontramos hilitos en comun. Algunos someten al mundo a un pañuelo, a mi me gusta pensar en las coincidencias y cerrar los ojos e intentar descifrar. Eso es, juego a descifrar entre la tristeza y la euforia. Bajo la lluvia y el humo y Mao. Descifro y dejo a medias y otras las resuelvo y me las guardo para mi. La lluvia y el plexo solar. Puedo respirar. Y las plantitas de yerbabuena, sabila, violetas africanas y demas, se ven hermosas en la ventana. Y atrás los cerros. Y desde donde los miro, se vuelve un lugarcito sagrado. La ciudad y las ironías. Las divagaciones y el pasar del tiempo. La compañia y la música y la desconexión. Desconectarse para conectarse en otro cuento. Poderlo escribir y contar hormigas al mismo tiempo.
12.10.07
Cualquier cosita es cariño.......
QUE LOS RUIDOS TE PERFOREN LOS DIENTES...
Que los ruidos te perforen los dientes,
como una lima de dentista,
y la memoria se te llene de herrumbre,
de olores descompuestos y de palabras rotas.
Que te crezca, en cada uno de los poros,
una pata de araña;
que sólo puedas alimentarte de barajas usadas
y que el sueño te reduzca, como una aplanadora,
al espesor de tu retrato.
Que al salir a la calle,
hasta los faroles te corran a patadas;
que un fanatismo irresistible te obligue a prosternarte
ante los tachos de basura
y que todos los habitantes de la ciudad
te confundan con un madero.
Que cuando quieras decir: "Mi amor",
digas: "Pescado frito";
que tus manos intenten estrangularte a cada rato,
y que en vez de tirar el cigarrillo,
seas tú el que te arrojes en las salivaderas.
Que tu mujer te engañe hasta con los buzones;
que al acostarse junto a ti,
se metamorfosee en sanguijuela,
y que después de parir un cuervo,
alumbre una llave inglesa.
Que tu familia se divierta en deformarte el esqueleto,
para que los espejos, al mirarte,
se suiciden de repugnancia;
que tu único entretenimiento consista en instalarte
en la sala de espera de los dentistas,
disfrazado de cocodrilo,
y que te enamores, tan locamente,
de una caja de hierro,
que no puedas dejar, ni por un solo instante,
de lamerle la cerradura.
o.g.
Que los ruidos te perforen los dientes,
como una lima de dentista,
y la memoria se te llene de herrumbre,
de olores descompuestos y de palabras rotas.
Que te crezca, en cada uno de los poros,
una pata de araña;
que sólo puedas alimentarte de barajas usadas
y que el sueño te reduzca, como una aplanadora,
al espesor de tu retrato.
Que al salir a la calle,
hasta los faroles te corran a patadas;
que un fanatismo irresistible te obligue a prosternarte
ante los tachos de basura
y que todos los habitantes de la ciudad
te confundan con un madero.
Que cuando quieras decir: "Mi amor",
digas: "Pescado frito";
que tus manos intenten estrangularte a cada rato,
y que en vez de tirar el cigarrillo,
seas tú el que te arrojes en las salivaderas.
Que tu mujer te engañe hasta con los buzones;
que al acostarse junto a ti,
se metamorfosee en sanguijuela,
y que después de parir un cuervo,
alumbre una llave inglesa.
Que tu familia se divierta en deformarte el esqueleto,
para que los espejos, al mirarte,
se suiciden de repugnancia;
que tu único entretenimiento consista en instalarte
en la sala de espera de los dentistas,
disfrazado de cocodrilo,
y que te enamores, tan locamente,
de una caja de hierro,
que no puedas dejar, ni por un solo instante,
de lamerle la cerradura.
o.g.
11.10.07
MI LU
mi lubidulia
mi golocidalove
mi lu tan luz tan tu que me enlucielabisma
y descentratelura
y venusafrodea
y me nirvana el suyo la crucis los desalmes
con sus melimeleos
sus erpsiquisedas sus decúbitos lianas y dermiferios limbos y gormullos
mi lu
mi luar
mi mito
demonoave dea rosa
mi pez hada
mi luvisita nimia
mi lubísnea
mi lu más lar
más lampo
mi pulpa lu de vértigo de galaxias de semen de misterio
mi lubella lusola
mi total lu plevida
mi toda lu
lumía
Oliverio Girondo
mi golocidalove
mi lu tan luz tan tu que me enlucielabisma
y descentratelura
y venusafrodea
y me nirvana el suyo la crucis los desalmes
con sus melimeleos
sus erpsiquisedas sus decúbitos lianas y dermiferios limbos y gormullos
mi lu
mi luar
mi mito
demonoave dea rosa
mi pez hada
mi luvisita nimia
mi lubísnea
mi lu más lar
más lampo
mi pulpa lu de vértigo de galaxias de semen de misterio
mi lubella lusola
mi total lu plevida
mi toda lu
lumía
Oliverio Girondo
9.10.07
Y dice :
Estrella de belen - achicoria - corazoncillo - botón de oro - genciana - acebo. Y un poco de brandy. Mas información en 3 semanas.
El lunes se acaba mientras alguien me habla de un espasmo y luego de salir corriendo hacia otra dirección, ir tejiendo un dibujo, algo inexistente. Cortesía de un predicador de voz enferma. Todo ardio, todo pareció consumirse sin mi consentimiento. Obvio, el fuego no va a pedirme permisito para hacer estragos. Yo no se si en el fondo hubiera querido que lo hiciera, porque seguro le iba a decir que no, que se quedara quieto, que se fuera a quemar otros bosquecitos, que se yo. Que dejara todo tal cual, ah si, porque así si que estaba todo bien. Y que nadie me diga mentirosa. Tengo un dragón a mis pies, que cuida mis sueños. Tengo un inconsciente que intenta decirme algo. Mi vida paralela somnolienta que no recuerdo del todo. ¿Qué horas son mi corazón? Eran las 6 am cuando abrí los ojos hoy, recordé un poco mis últimos sueños y me sentí enferma, un poco obsesiva. No quise quedarme mas ahí dando vueltas con los ojos medio abiertos y la mente comenzando a perturbar. ¿Qué horas son mi corazón? Eran mas o menos las 8:30 am cuando me advertían sobre mi plexo abierto. Era algo tan obvio y sin embargo yo nunca lo hubiera puesto bajo esas palabras. A veces lo que está ahí es lo mas dificil de ser nombrado. Lo sabemos pero no lo decimos. Shhhh...... corazón......... cierra los ojos que aquí no ha pasado nada. Si claro. Bala perdida, bang bang. Bala perdida que nos dió a los que mirabamos el cielo. Y ahí sangrando bajo un cielo del cual solo se señalar la constelación de orión con certeza. De resto juego a adivinar sobre marte y saturno. Es patético, pero tambien hermoso. ¿Qué horas son mi corazón? Eran las 9:20 am cuando todo se equilibró excepto mi pancreas. El cuento del dulce. Hoy, corazón, no hubo ansiedad alguna por chocolate o algo parecido. Hoy quería algo frio en la boca, pedacitos de hielo. ¿Qué horas son mi corazón? Era la 1:30 pm cuando conversaba con mi socio en el negocio de los corazones rotos y su campamento de micky mouse en las drogas. Y no dulce, solo tiritas de mango biche enredadas en palitos de madera. Ni helado de café ni creme bulle. Mango biche y limonada con poco azúcar. ¿Qué horas son mi corazón? Eran las 9 pm cuando decidí agradecer a Mr. Brightside, su aparición del día. Y si, creo que se va tejiendo un dibujo. Algo que aun no comprendo pero pronto iré visualizando lo que significan esos hilitos. Aunque ya no hayan violetas........ pero eso es otra historia de la que no hablaré ahora. ¿Qué horas son mi corazón? Y el late y me dice entonces que no mas reloj. El día ha terminado, en teoría. El dragón verde bosteza y yo le doy su respectivo beso de buenas noches.
El lunes se acaba mientras alguien me habla de un espasmo y luego de salir corriendo hacia otra dirección, ir tejiendo un dibujo, algo inexistente. Cortesía de un predicador de voz enferma. Todo ardio, todo pareció consumirse sin mi consentimiento. Obvio, el fuego no va a pedirme permisito para hacer estragos. Yo no se si en el fondo hubiera querido que lo hiciera, porque seguro le iba a decir que no, que se quedara quieto, que se fuera a quemar otros bosquecitos, que se yo. Que dejara todo tal cual, ah si, porque así si que estaba todo bien. Y que nadie me diga mentirosa. Tengo un dragón a mis pies, que cuida mis sueños. Tengo un inconsciente que intenta decirme algo. Mi vida paralela somnolienta que no recuerdo del todo. ¿Qué horas son mi corazón? Eran las 6 am cuando abrí los ojos hoy, recordé un poco mis últimos sueños y me sentí enferma, un poco obsesiva. No quise quedarme mas ahí dando vueltas con los ojos medio abiertos y la mente comenzando a perturbar. ¿Qué horas son mi corazón? Eran mas o menos las 8:30 am cuando me advertían sobre mi plexo abierto. Era algo tan obvio y sin embargo yo nunca lo hubiera puesto bajo esas palabras. A veces lo que está ahí es lo mas dificil de ser nombrado. Lo sabemos pero no lo decimos. Shhhh...... corazón......... cierra los ojos que aquí no ha pasado nada. Si claro. Bala perdida, bang bang. Bala perdida que nos dió a los que mirabamos el cielo. Y ahí sangrando bajo un cielo del cual solo se señalar la constelación de orión con certeza. De resto juego a adivinar sobre marte y saturno. Es patético, pero tambien hermoso. ¿Qué horas son mi corazón? Eran las 9:20 am cuando todo se equilibró excepto mi pancreas. El cuento del dulce. Hoy, corazón, no hubo ansiedad alguna por chocolate o algo parecido. Hoy quería algo frio en la boca, pedacitos de hielo. ¿Qué horas son mi corazón? Era la 1:30 pm cuando conversaba con mi socio en el negocio de los corazones rotos y su campamento de micky mouse en las drogas. Y no dulce, solo tiritas de mango biche enredadas en palitos de madera. Ni helado de café ni creme bulle. Mango biche y limonada con poco azúcar. ¿Qué horas son mi corazón? Eran las 9 pm cuando decidí agradecer a Mr. Brightside, su aparición del día. Y si, creo que se va tejiendo un dibujo. Algo que aun no comprendo pero pronto iré visualizando lo que significan esos hilitos. Aunque ya no hayan violetas........ pero eso es otra historia de la que no hablaré ahora. ¿Qué horas son mi corazón? Y el late y me dice entonces que no mas reloj. El día ha terminado, en teoría. El dragón verde bosteza y yo le doy su respectivo beso de buenas noches.
8.10.07
7.10.07
El elixir de la cabra loca
Viernes en la noche. Noche emocionalmente desgastada ya. No era tan tarde y sin embargo era muy tarde ya para otras cosas. Ese día después del pequeño ataque de ansiedad, había decidido irme con el vestidito blanco y negro, zapatitos rojos. Irme como una muñequita a decir mi par de verdades. Llovió tanto entonces e hizo tanto frio que irme como muñequita tiritando, no era muy agradable. Creo que dije entonces lo que necesitaba decir. Y hay otras cosas que tal vez debí decir, pero siento que ya no le pertenecen mas. Lo supe cuando intenté escribirle una carta al mediodia y no lo logré, hecho extraño porque escribirle ha sido de las pocas cosas literarias que he conservado. En fin. Ahora juego con esto del blog. Me dormí temprano y soñe mucho. En teoría se trata del elixir de la cabra loca, pero siempre me pasa, sobretodo ultimamente. Sueño y sueño (sin necesidad de ningun elixir). A veces siento que controlo los sueños, a veces no. Quisieran saber que significan algunos, aunque eso signifique abrir pequeñas cajas de pandora escondidas en el inconsciente. Ha empezado anochecer, hay un perro esquizofrenico que no ha parado de ladrar desde hace un buen rato. Tengo una sonrisita en el rostro, no tengo sentimiento de desasosiego. Hoy no. Hoy ha sido un día extraño. Agradezco por eso. Hoy me di un regalo, algo que no parecería muy mio. Me parezco mas a la femme chocolat. O tal vez no es que no sea yo, es que es parte de ese cambio que se ha venido dando. Todo se ha caído, he llorado por los muertos y les he llevado flores durante 15 días. He perdido peso, he sostenido una mirada melancólica, mi estómago ha decidido comportarse como le ha dado la gana. Todo eso se veía venir. Por eso agradezco un domingo extraño, en el que no me consume la tristeza. En el que veo algo distinto y puedo alegrarme de cierta forma. Aun cuesta respirar, pero que bien se siente hacerlo. Habrá que ver entonces como le va a la femme chocolat por estos días. La dejo al mando, finalmente hoy al mediodia se veia hermosa ahi sola en ese mundo chino.
4.10.07
3.10.07
2.10.07
que si esto es un circo........ es un circo extraño, que tiene mas pretensiones que habilidades.
que si ud pertenece a él es entonces el trapecista.......... y que si yo hago parte de esa misma historia, soy la mujer bala.
que a la esperanza la rechazan en los circos. y que a los payasos suelen humillarlos de mas. por eso los hemos matado a todos. yo escondi mi nariz roja para no levantar sospechas.
que si ud pertenece a él es entonces el trapecista.......... y que si yo hago parte de esa misma historia, soy la mujer bala.
que a la esperanza la rechazan en los circos. y que a los payasos suelen humillarlos de mas. por eso los hemos matado a todos. yo escondi mi nariz roja para no levantar sospechas.
27.9.07
Será que ahora si?
Es un momento extraño de mi vida, de esos un poco definitivo para muchas cosas que se soñaron alguna vez. Los demonios y mi alterego de antiheroe están al mando y por eso necesito escribir, darles algo en que pensar, pequeñas obras que interpretar que no sean mi vida. Necesito que arruinen algo mas. Siempre he postergado estos momentos cuasi literarios. La pereza y la vanidad. Y ahora tan solo se trata de un poco de supervivencia. De no pasar las noches hilando casos perdidos, intentando comprender lo que no quiero. Si los erase una vez me conmueven y me entristecen. Y si los habrá una vez, me resultan inevitablemente sospechosos. Y que si el presente se nombra, se nombra fragmentado. Pequeños episodios de no mas de tres minutos. Cortina roja. Silencio. Nunca aplausos. Otros tres minutos, quizás cuatro. Una obra incoherente e interminable.
26.5.07
instrucciones para despertar de una anestesia.
Asegurese de abrir los ojos con la suficiente calma para que el mundo no se quiera meter por ellos. Primero el izquierdo, a una altura de un angulo de 15 grados. El ojo deberá ir de izquierda a derecha revisando los colores. Una vez descubra que todos le son familiares, abra el ojo un poco mas (suficiente tres grados) y asegurese que no haya un naufragio a la vista o nubes por doquier. Continue con la apertura del ojo derecho de una manera contundente. Lleve su mirada a un punto fijo, pida un vaso con agua con voz de tenor deprimido y pida que rompan todos los espejos de la habitación. Una vez se sepa con vida y con suerte, una vez le hayan informado que la operación ha sido un exito y que no solo le han extirpado "la bola" sino también el riñon cronopio, tome su mano derecha y pongala sobre la venda que cubre la atrocidad sucedida (la del riñon) respire hondo y sonría, vuelva a cerrar los ojos y asegurese de caer en un sueño profundo donde la ambulancia sea una ópera roja y donde no tenga que despedirse de nadie y no tener que contestar a la pregunta del doctor sobre que se deberá hacer con "la bola" y el riñon extirpado. Una vez en casa, no despierte hasta que le cuenten un bonito cuento que no le recuerde nada, que lo impregne de imágenes rosas que no le producen cansancio. Imaginese con barba en un pequeño fin del mundo. Salude a las cicatrices y los peces amarillos. Deje ir la tristeza, como un pacto de honor entre la vida y usted. Mire al cielo, el mas azul posible y revise si en su ausencia se ha quemado un poco. Por último, antes de recobrar los 5 sentidos, dese permiso para una locura. Deje que todos crean que es efecto de la anestesia.
17.2.07
y si....... otra vez al aire.
Se me olvidó por un momento la verdadera razón de lo que significa mi sistema digestivo en mi. Que si siento un vacio en el estomágo lo llamo gastritis y deduzco ligeramente que fueron las cervezas de la noche anterior. Me toma casi todo el día entender que me tratan de decir. Llega la noche y en un momento de intenso aburrimiento, como es esperar a que el horno cumpla la función debida, una voz me dice, vértigo..... y lo juro que en ese momento creí haberlo entendido todo. Rompo la idea romántica del corazón y recuerdo que el mio es mi estomago. Que mis tripas son mi alma. Y que cuando ellos quieren manifestarse, saben hacerlo a su manera. Vértigo. Ahí está, aun descubierto, se manifiesta mas fuerte. Yo respiro hondo, no llores Julianita...... disfrutá la sensación que de aqui nadie se va a caer. Y si nos caemos, recuerda muy bien, que lo que duele no es la caída es el aterrizaje y que en el momento de aterrizar, yo de alguna forma voy a salvarte. Esa es Angelita, la mas dulce, la mas alegre. Aparece de la nada, porque sabe bien que yo la he tenido alejada, escondida, hablando sus hermosos disparates a armadillos y demás. La he tenido alejada, protegiendola del siniestro personaje. Aunque ella, es la que ha podido enfrentarlo mas cariñosamente y lo ha hecho reir como rara vez lo ha hecho conmigo. Pero tengo una incapacidad de dejarla frente al monstruo de nueve cabezas, porque soy una maldita pesimista y creo que no va a salir con vida. Que si llora una vez mas, será por mi culpa y yo no puedo exponerla tanto. Esa es una batalla que me toca librar a mi. Que si destrozan a alguien, ella quede intacta.
Lobito, lobito, nos volvemos a ver la cara. Sabes muy bien que aun me sangran las manos y yo se perfectamente, que has llorado un poco al ver mis heridas. Pero si apareces no es para manifestar que has aprendido el arte de la compasión, sino que el arte de la guerra es el que mas nos gusta. Y que si las manos sangran, yo te hago bonitos dibujos en la panza. Y que si me muestras los dientes, yo voy a intentar contarlos uno tras otro, con el índice del miedo y los ojos mirando siempre al cielo. Y ya lo dijiste, no saldremos bien de esta. Pero es el vértigo y no puedo moverme. Y tu no te mueves porque quieres verme reir y yo puedo reir aun con el corazón destrozado. Supongo que aun no lo he perdido todo y que no debería tentar mi suerte. Ya está demostrado y comprobado que las cosas pueden ponerse cada vez peor. Que bien me quedó aprendida la lección, pero aun así no pienso retirarme, ni de vos siniestro personaje, ni de la cuerda floja, ni retirar ninguna de las esquirlitas de flores siempre violetas, que se caigan por si solas o se las lleve el viento o me las llevo conmigo y les cuento historias sobre los armadillos de angelita. Y que si esta es una jodida ruleta rusa, merezco salir con vida. Y a eso voy a apostarle. Y pretensiosa y tal vez estúpidamente ingenua. Pero si no es ahora que siento que hay cosas que pueden ser saldadas, tal vez no lo sea nunca. Mas que el miedo, es una reivindicación que no espero que me la de nadie, excepto yo. Y ese es el jodido vértigo, porque estoy poniendo en mis manos mi propia suerte. En las manos pequeñas y ensangrentadas de niña de 7 años que tengo.
Angelita dormí tranquila, que la alimaña ha regresado.
Lobito, lobito, nos volvemos a ver la cara. Sabes muy bien que aun me sangran las manos y yo se perfectamente, que has llorado un poco al ver mis heridas. Pero si apareces no es para manifestar que has aprendido el arte de la compasión, sino que el arte de la guerra es el que mas nos gusta. Y que si las manos sangran, yo te hago bonitos dibujos en la panza. Y que si me muestras los dientes, yo voy a intentar contarlos uno tras otro, con el índice del miedo y los ojos mirando siempre al cielo. Y ya lo dijiste, no saldremos bien de esta. Pero es el vértigo y no puedo moverme. Y tu no te mueves porque quieres verme reir y yo puedo reir aun con el corazón destrozado. Supongo que aun no lo he perdido todo y que no debería tentar mi suerte. Ya está demostrado y comprobado que las cosas pueden ponerse cada vez peor. Que bien me quedó aprendida la lección, pero aun así no pienso retirarme, ni de vos siniestro personaje, ni de la cuerda floja, ni retirar ninguna de las esquirlitas de flores siempre violetas, que se caigan por si solas o se las lleve el viento o me las llevo conmigo y les cuento historias sobre los armadillos de angelita. Y que si esta es una jodida ruleta rusa, merezco salir con vida. Y a eso voy a apostarle. Y pretensiosa y tal vez estúpidamente ingenua. Pero si no es ahora que siento que hay cosas que pueden ser saldadas, tal vez no lo sea nunca. Mas que el miedo, es una reivindicación que no espero que me la de nadie, excepto yo. Y ese es el jodido vértigo, porque estoy poniendo en mis manos mi propia suerte. En las manos pequeñas y ensangrentadas de niña de 7 años que tengo.
Angelita dormí tranquila, que la alimaña ha regresado.
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