24.12.10

the essence of rabbit - el mandala de los conejos.



Otra vez.....


Es invierno. Llueve, todo se inunda, hace frio. El lobo está ahí, rezagado, apartado y escondido. En una leve hibernación. El turista, que se cree un buen turista y y que por eso dice regresar al jardín primitivo, regresa con esa actitud tropical mientras todo está helado. Llega a aquel lugar y se hace pasar por quien jamás podrá ser, tiene un tufillo vanidoso, uno que huele a actitud de haber tenido a la mejor flor de aquel jardín en su bolsillo. Regresa haciendo todo el ruido que puede hacer, finalmente sabe que no puede ser tanto porque si llegan a oírlo en la ciudad, vendrán por él y él, tendrá que entregar de nuevo al lobo fugitivo y paria. Típico de un turista que no tiene los suficientes cojones para asumir sus secretos porque está muy cómodo con su vida tal como está.

El turista ha encontrado al lobo. Dice que se ha preocupado porque se ha enterado de su anemia, de su tristeza. El lobo bosteza y sonríe. Ni siquiera se levanta a abrazarlo, ni siquiera lo invita a ponerse cómodo, no será mucho tiempo el que pasen juntos. El lobo le confiesa estar enfermo, no va a perder tiempo fingiendo un estado imposible de disimular. El turista habla de su bienaventurada vida y de su vocación de salvador de animalillos heridos, pero solo cuenta con una aspirina y cree tener idea de todo y no sabe cuántas cosas han pasado desde la última vez. Así que mejor ahorrarse el tiempo que el turista no tiene y que el lobo no apetece en darle, así que se afanan en despedirse (siempre el turista tendrá mas afán después de haberse tomado la molestia de ser él el que aparece) y se acercan para decirse en voz baja lo mucho que se quieren, se desean feliz navidad mientras esperan no volver a verse.

pda: esto seguro lo entiende.

20.12.10

Lección de anatomía

más allá del dolor y del placer la carne
inescrutable
balbuceando su lenguaje de sombras y brumosos
colores

la carne convertida en paisaje
en tierra en tregua en acontecimiento
en pan inesperado y en miel
en orina en leche en abrasadora sospecha
en océano
en animal castigado
en evidencia y en olvido

viendo la carne tan cerrada y distante
me pregunto
qué hace allí la vida simulando

el cabello a veces tan cercano
que extravía alojo en su espesura
las bisagras silenciosas cediendo
lagrimeando tornasol
y esa otra fronda inexplorada
en donde el tacto confunde
el día con la noche
fresca hermosa muerte a la mitad del lecho
donde los miembros mutilados retoñan
mientras la lengua gira como una estrella
flor de carne carnívora
entre los dientes de carbón

ah la voz gangosa entrecortada dulcísima del amor
saciándote saciándose saboreando el ciego bocado

los mondos los frágiles huesecillos del amor
ese fracaso ese hambre
esa tristeza futura
como el cielo de una jaula
la tierra gira
la carne permanece
cambia el paisaje
las horas se deshojan
es el mismo río que se aleja o se acerca
tedioso espejo con la misma gastada luna de yeso
que se esponja hasta llenar el horizonte
con su roñosa palidez

merodean las bestias del amor en esa ruina
florece la gangrena del amor
todavía se agitan las tenazas elásticas
los pliegues insondables laten

reino de ventosas nacaradas
osario de mínimos pájaros

primavera de suaves gusanos agrios
como la bilis materna

más allá del dolor y del placer
la negra estirpe
el rojo prestigio
la mortal victoria de la carne

Blanca Varela.

A Devia, quien me presentó a esta increíble mujer..... y que sus palabras reflejan lo que siento hoy y yo no sé como explicar.

2.12.10

oh!

Se desbarata poco a poco, querida Soledad.  Haz algo me dice ella y yo desde mi típica dignidad le digo que no se puede hacer mucho, como si no me correspondiera nada.  Ah, actitud de princesita adolorida.  Oh si, Soledad.  Vuelvo a los mismos comportamientos (soy un buen animal fiel a sus instintos pareciera), vuelvo a huir ante los malos tonos, ante el asomo del conflicto.  Huir dejando palabras en la boca del otro, no sin antes echarme una frasecita irónica y ofensiva.  Pierdo la paciencia con facilidad y me escudo en lo mal que está todo.  Que si Soledad, que si tengo autocrítica, pero que por alguna razón no le admito nada, como si eso fuera una traición a uno mismo o como si intentara proteger mi autoestima, pero en el fondo sé lo que me toca de todo el asunto.  Y sé de otras cosas que aun no he terminado de digerir y que rondan por mi cabeza y de las que no quiero hablar con nadie.

Y luego despierto y ahí está él y la rabia se ha ido y la estupidez también.  Y no quiero levantarme, quiero seguir ahí, Soledad, arrunchada y feliz.  Y ahí si, todo tan fácil y tan bonito.

Pinche bipolaridad.

Xavi Comas y los ascensores de Tokyo.



23.11.10

agua pasó por aquí.

Llueve. Llueve todo lo que puede llover. Llueve de abajo hacia arriba y a los lados y no hay sombrilla que resista. El centro se nubla tanto a veces que casi no puedo ver a Monserrate y eso que se le siente tan cerca. Me mojo una y otra vez. Con felicidad pocas veces y con resignación otras tantas. Me sumerjo en charcos lentamente con miedo de encontrar una alcantarilla destapada y hacer parte de la leyenda urbana de caer por ahí y no volver a aparecer (un acto de desaparición triste y solitario). Siento mucho frío y recuerdo que mi espíritu es calentano…. Y aumentan las chaquetas (todavía no abrigan lo suficiente) y aumentan las capas de ropa como si fuera una cebolla ambulante. Pienso en lo duro que es ser habitante de la calle en una ciudad fría, los pequeños pueblos costeros deben ser tanto más generosos, pero supongo que capital es capital y hay tantos que prefieren estar aquí, que debe tener un misterio que yo no logro comprender.

Y tanto gris, me abruma un poco y mi ánimo se entremezcla con el cielo que debía tener algo de luz porque apenas son las 5, pero parece que fueran las 8 de la noche. Afortunadamente en estos tres últimos días se asoma un poco el sol y parece todo en una extraña calma, como el pequeño ojo de un huracán.

16.11.10

Have a lucky day........

Have a lucky day me decía siempre en las mañanas, después del beso de buenos días.  Y si, tal vez me sentía un poco afortunada, hace rato que sentía que la tormenta había pasado y que había aprendido algunas cuantas lecciones para no sentirme amenazada de nuevo cuando el siniestro personaje intentara joderme.  Por eso cuando me encontraba con él, sonreía bastante, me mostraba confiada, hablaba con dejo del pasado….. y claro está, nada de dramas, nada de revelar algún indicio de apego.

 Pero después de dos años de andar jugando con él, nos encontramos frente a frente, con verdades a medias y mentiras bien dichas; con revelaciones que una vez aceptadas resultan tan obvias; con confesiones que solo muestran la realidad de la condición humana; secretos dichos a otros a los gritos pero decididamente ocultos a quien involucra de una u otra manera.  Y después vienen las acusaciones, la rabia, la impotencia……. Después el desahogo, el alivio.  Y al final el sentimiento de no saber qué hacer con todo eso.

20.10.10

Mis experimentos



Un adelanto de lo que luego deberá ser un post en nombre de mi perra Alfalfa (ésta última).  He comenzado a experimentar con algunas fotos y esto ha salido y lo quiero compartir.  Así que ahí les dejo.